En el entorno urbano de la Ciudad de México (CDMX), la convivencia entre humanos y animales presenta desafíos únicos, especialmente cuando se trata de incidentes con perros. La falta de medidas preventivas por parte de los dueños de mascotas ha llevado a un incremento notable en los ataques de perros en áreas públicas, poniendo en riesgo la seguridad de la comunidad.
Durante el año 2022, la CDMX registró aproximadamente 5,600 incidentes de ataques de perros, una cifra alarmante que podría seguir aumentando si no se implementan las regulaciones adecuadas. Estos ataques suelen ocurrir más frecuentemente en parques y espacios abiertos donde los niños son particularmente vulnerables.
Legislación Vigente y Sanciones
La Ley de Cultura Cívica de la CDMX establece sanciones específicas para los propietarios de perros que no cumplen con las normas de comportamiento cívico. Según el Artículo 28, Fracción I, los dueños pueden enfrentar multas de hasta 4,149 pesos, arresto de 13 a 24 horas o trabajo comunitario de 6 a 12 horas si su perro ataca a una persona.
Responsabilidades del Dueño de Mascotas
El Artículo 26 de la misma ley subraya la importancia de mantener la higiene urbana, incluyendo la obligación de recoger las heces de las mascotas y evitar el abandono de desechos en la vía pública. Las infracciones a estas normas pueden resultar en multas de 1,000 a 2,100 pesos y también pueden incluir arresto.
Cómo y Dónde Denunciar
Si se presencia o se es víctima de un ataque de perro, es crucial reportarlo a la Brigada de Vigilancia Animal (BVA) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana. Los ciudadanos pueden contactar a la BVA llamando al 55-52-08-98-98 o visitando sus oficinas en Avenida Manuel Ávila Camacho S/N, Ciénega Grande, Xochimilco.
Frente al aumento de ataques de perros en la CDMX, es esencial que los ciudadanos estén informados sobre las leyes y las sanciones correspondientes. El respeto y cumplimiento de estas normativas no solo protegen al público, sino que también aseguran un entorno más seguro y armónico para todos, incluyendo nuestras mascotas.
Para mantener nuestras comunidades seguras y limpias, es responsabilidad de todos los dueños de mascotas adherirse a las normativas establecidas y educar a sus animales adecuadamente. Al hacerlo, contribuimos a la prevención de futuros incidentes y promovemos el bienestar comunitario.
