Una grave polémica rodea al Centro de Distribución (CEDIS) de HEB en Escobedo, tras denuncias en redes sociales sobre un presunto caso de acoso laboral y abuso verbal durante un proceso de reclutamiento laboral. Las acusaciones apuntan a un comportamiento alarmante por parte de quienes dicen representar a la cadena.
La controversia surgió cuando usuarios comenzaron a compartir capturas de pantalla de conversaciones por WhatsApp, donde se evidencian insultos y expresiones agresivas por parte de los supuestos reclutadores. Frases como “Responde hija de tu pta madr” y “tienes la v*rga en la boca” fueron dirigidas a aspirantes que solicitaron información o no pudieron asistir a una entrevista laboral.
Este tipo de lenguaje no solo resulta inaceptable, sino que representa una forma directa de violencia digital, discriminación de género y acoso laboral desde el primer contacto, lo cual contraviene las normas más básicas de ética profesional y respeto.
Las ofertas laborales difundidas, ligadas al CEDIS HEB Escobedo, prometen sueldo base competitivo, bonos, transporte y prestaciones superiores a las de ley. Sin embargo, el número de contacto que figura en estos anuncios coincide con el de los agresores señalados, lo que pone en entredicho la legitimidad del proceso de contratación.
Aunque se ha verificado en plataformas como Google Maps la existencia del centro de distribución de HEB en Escobedo, las denuncias sugieren una posible suplantación de identidad o, peor aún, una grave negligencia en los procesos de supervisión de personal encargado del reclutamiento.
Lo más preocupante es que hasta el momento, la empresa HEB México no ha emitido ningún comunicado oficial para aclarar si los individuos involucrados pertenecen realmente a su equipo de recursos humanos. Esta falta de respuesta contribuye a un ambiente de desconfianza, donde las víctimas de este trato denigrante se sienten desprotegidas y sin una vía clara para presentar quejas.
Este silencio corporativo pone en tela de juicio el compromiso de HEB con la ética, el respeto y la equidad de género en sus procesos laborales, especialmente en un contexto donde las empresas son llamadas a tener cero tolerancia frente al acoso y la violencia.
Ante este panorama, diversos usuarios en redes han sugerido a las personas afectadas interponer denuncias formales ante PROFEDET, CONAPRED y otras instancias defensoras de derechos laborales y protección de datos personales. El caso se ha viralizado rápidamente y refleja una problemática mucho más amplia: la normalización del abuso en procesos de contratación, donde muchos aspirantes se ven obligados a tolerar maltratos por necesidad de empleo.
Mientras el escándalo sigue creciendo y más usuarios comparten sus experiencias similares, la ausencia de una postura oficial por parte de HEB solo agudiza las críticas y deja en evidencia una falta de responsabilidad institucional ante situaciones de acoso y violencia laboral.
La reputación de una empresa no se construye únicamente con buenos beneficios o infraestructura moderna, sino con el trato humano, digno y profesional hacia cada persona que toca a su puerta buscando una oportunidad.