Colectivos de artesanos indígenas han levantado la voz contra el Gobierno de la Ciudad de México, acusando específicamente a la Subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de la Vía Pública de ser la responsable del retraso en la tan esperada Fiesta de las Lenguas Indígenas. Este evento, que debería celebrar la riqueza y diversidad cultural de las comunidades indígenas, parece haberse visto empañado por una serie de desaciertos y descuidos por parte de las autoridades encargadas de su organización.
La Fiesta de las Lenguas Indígenas, que tenía como fechas programadas del 30 de marzo al 14 de abril de 2024, no ha podido arrancar debido a lo que los artesanos describen como “mala planeación y operación” por parte de la Subsecretaría. Este retraso no es solo un contratiempo logístico, sino que representa un menosprecio hacia las comunidades indígenas que ven en este evento una plataforma vital para la difusión y celebración de sus culturas y lenguas.
La carta emitida por los colectivos artesanales indígenas revela un panorama desalentador: acuerdos no respetados, listados duplicados, asignaciones de espacios ignoradas, y una falta generalizada de coordinación y comunicación por parte de las autoridades. La descripción detalla un caos organizativo en el que se toleraron invasiones de espacio y se observó una ausencia casi total de las instituciones involucradas en la preparación y difusión del evento.
Más allá de los problemas logísticos, lo que resalta es una aparente indiferencia del gobierno de la CDMX hacia las comunidades indígenas. Las acusaciones de los artesanos van desde la falta de difusión y publicidad del evento hasta la carencia de un diseño adecuado para los gafetes de identificación, pasando por la exposición de los participantes y sus mercancías a condiciones adversas sin el menor apoyo institucional.
Este escenario plantea serias preguntas sobre el compromiso del gobierno de la Ciudad de México con la preservación y promoción de las culturas indígenas. Los eventos como la Fiesta de las Lenguas Indígenas no son solo celebraciones; son actos de reconocimiento y respeto hacia las raíces y la diversidad cultural de México. Que un evento de esta magnitud sufra tales contratiempos revela una desconexión preocupante entre las autoridades y las necesidades de las comunidades indígenas.
Es imperativo que el Gobierno de la CDMX tome acciones concretas para remediar esta situación. La organización de la Fiesta de las Lenguas Indígenas debe ser una prioridad no solo como un acto de reparación hacia los colectivos afectados, sino como una muestra de respeto hacia la diversidad cultural y lingüística de la ciudad. El evento, y más importante aún, las comunidades que representa, merecen un esfuerzo organizativo que esté a la altura de su significado cultural y social.
Notidex insta a una reflexión profunda y acciones inmediatas por parte de las autoridades. La Ciudad de México debe ser un ejemplo de inclusión, respeto y valoración de todas sus culturas. La Fiesta de las Lenguas Indígenas no solo debe celebrarse; debe ser un reflejo del compromiso de la ciudad con su diversidad y riqueza cultural. La cultura indígena no es un adorno; es el corazón de nuestra identidad colectiva, y como tal, debe ser honrada y protegida.
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