El Sistema de Aguas en la Ciudad de México ha reportado que al menos el 60% de las anegaciones en calles y avenidas durante la temporada de lluvias se deben a la basura que obstruye las alcantarillas. Este problema, que afecta a millones de ciudadanos, es atendido gracias al arduo trabajo de las cuadrillas de limpieza de la Secretaría de Obras y Servicios Urbanos del Gobierno de la Ciudad de México.
La Lucha Nocturna contra la Basura
Silvia, una trabajadora de limpieza de 43 años y madre de tres hijos, lidera una cuadrilla que opera de noche para asegurar que las calles estén limpias durante el día. A pesar de las condiciones adversas, Silvia y su equipo se dedican a limpiar áreas como el Eje Uno Norte López Rayón, conocido por su alta generación de basura debido a la gran cantidad de comercios cercanos al Barrio de Tepito.
Durante sus seis años de servicio, Silvia ha enfrentado numerosos riesgos, especialmente durante la lluvia intensa. “Los coches pierden visibilidad cuando está muy fuerte la lluvia. Como pasan muy rápido, luego no respetan el que uno esté en la orillita. Una camioneta se pasó por la banqueta y yo estaba ahí. Sí, tardé un mes de incapacidad”, relata Silvia, destacando la peligrosidad de su labor nocturna.
Las cuadrillas de limpieza, a pesar de estar abanderadas con trafitambos y camionetas, enfrentan peligros constantes. Alicia, otra integrante del equipo, menciona los riesgos adicionales como encuentros con personas agresivas y accidentes laborales. “He visto compañeros que se han enterrado agujas, que se han cortado, el compañero trae unas botas de hule y se enterró un clavo creo”, comenta Alicia, subrayando los desafíos que enfrentan diariamente.
Un Trabajo de Oportunidades para Todos
Estas cuadrillas, que dependen de la Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México, están conformadas por al menos dos mil personas. Las alcaldías también participan en la prestación de este servicio esencial. Este trabajo no solo proporciona ingresos, sino también oportunidades para adultos mayores. Lucía y Fidel, una pareja de trabajadores de limpieza, expresan su satisfacción con la labor que realizan. “Yo soy bien feliz porque me gusta barrer. Tengo 64. Y como tenemos cuatro nietos, pues hay que estar también al pendiente de ellos”, afirma Lucía, destacando cómo esta ocupación les permite mantenerse activos y cuidar de su familia.
En conclusión, la limpieza de las calles y la correcta recolección de basura son fundamentales para prevenir inundaciones y mantener la ciudad en condiciones óptimas durante la temporada de lluvias. El compromiso y el esfuerzo de las cuadrillas de limpieza, a menudo subestimados, son esenciales para el bienestar de la Ciudad de México. A pesar de los riesgos y desafíos, estos trabajadores continúan desempeñando un papel vital en la protección y mantenimiento de la infraestructura urbana.