En los últimos días, la preocupación de los residentes de varias colonias de la Ciudad de México por la calidad del agua que fluye por sus grifos ha alcanzado nuevos niveles. Los habitantes de la Benito Juárez han reportado un persistente olor a gasolina en el agua potable, un tema que ha ganado tracción tanto en plataformas digitales como en los corrillos locales, pese a las recientes declaraciones del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX) negando la presencia de contaminantes.
Las colonias afectadas incluyen, pero no se limitan a, Ciudad de los Deportes, Nochebuena, del Valle Norte, Nápoles, San Pedro de los Pinos, Nonoalco, Mixcoac y Tlacoquemécatl, según un mapa interactivo de denuncias ciudadanas que se ha vuelto una herramienta vital para el seguimiento del problema. Este instrumento digital, alimentado por las observaciones de los propios vecinos, ha registrado hasta la fecha 61 incidencias relacionadas con este fenómeno.
Luciana Gandini, distinguida investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, ha añadido una voz experta a la conversación, reportando no solo el desagradable olor sino también efectos adversos sobre la salud, como la aparición de eczemas tras el contacto con el agua. Su testimonio personal refleja una creciente preocupación por el bienestar de los afectados y pone en relieve la urgencia de una respuesta oficial y medidas correctivas.
A pesar de la alarmante acumulación de testimonios, la respuesta de SACMEX, plasmada en un comunicado el pasado 2 de abril, asegura que el agua distribuida en las áreas señaladas cumple con todas las normas de calidad y es segura para el consumo humano. Esta posición contrasta marcadamente con la experiencia de los residentes y los datos emergentes de las pruebas independientes que se están llevando a cabo.
La alcaldía Benito Juárez, buscando claridad y con el objetivo de proteger a sus ciudadanos, ha tomado la iniciativa de enviar muestras de agua para análisis en laboratorios externos. A la espera de estos resultados, la comunidad se encuentra en un estado de incertidumbre y demanda transparencia, así como acciones concretas para asegurar la calidad de su agua potable.
Este creciente conflicto resalta no solo la importancia de la vigilancia constante sobre los recursos esenciales, sino también el papel crucial de la comunicación abierta entre las autoridades y la población. A medida que la situación evoluciona, Notidex se compromete a mantener informados a sus lectores, siguiendo de cerca el desarrollo de los acontecimientos y las respuestas de las autoridades competentes. La salud y seguridad de los habitantes de la CDMX permanecen como nuestra prioridad en este reportaje continuo.