El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha generado controversia al extender una invitación a Vladimir Putin para asistir a la ceremonia de toma de posesión de la futura presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, el próximo 1 de octubre. Este gesto diplomático ha suscitado un intenso debate debido a la orden de detención emitida contra Putin por la Corte Penal Internacional (CPI).
En marzo de 2023, la CPI acusó a Vladimir Putin de la presunta deportación de niños de Ucrania, país que Rusia ha invadido desde el 24 de febrero de 2022. Esta acción ha sido condenada por la comunidad internacional y ha puesto a Putin bajo un escrutinio legal y moral a nivel global. La “invitación” a Putin, según ha explicado la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, se enmarca en el protocolo diplomático estándar del país, el cual incluye a todos los mandatarios de naciones con las que México mantiene relaciones diplomáticas.
La SRE emitió una breve tarjeta informativa para aclarar la situación:
“En concordancia con nuestro protocolo diplomático, el Gobierno de México remitió notas diplomáticas a todas las naciones del mundo con las que mantiene relaciones para participar en la toma de posesión de la Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, para la administración 2024-2030.”
Desde el equipo de prensa de Claudia Sheinbaum, la virtual presidenta electa, se reiteró que lo enviado fue un “aviso diplomático” y no una invitación formal, diferenciando así el acto protocolario de una convocatoria personal.
La agencia estatal de noticias rusa TASS informó este martes que Vladimir Putin recibió la invitación para asistir a la toma de posesión de Sheinbaum, citando a la embajada de México en Rusia como fuente de la información. Esta noticia ha provocado una serie de reacciones, dada la situación legal de Putin y el compromiso de México con el Estatuto de Roma, firmado en 2005, que establece la obligación de los Estados de ejercer jurisdicción penal sobre los responsables de crímenes internacionales.
Implicaciones Legales y Diplomáticas
La invitación a Putin plantea varios dilemas legales y diplomáticos para México. Como firmante del Estatuto de Roma, México tiene el deber de colaborar con la CPI en la persecución de crímenes internacionales. La presencia de Putin en territorio mexicano podría implicar una serie de desafíos y tensiones, tanto a nivel nacional como internacional.
En conclusión, la polémica invitación a Vladimir Putin para la toma de posesión de Claudia Sheinbaum ha puesto a México en el centro de un delicado equilibrio diplomático. Mientras el gobierno de López Obrador defiende su acción como parte de un protocolo estándar, la comunidad internacional observa con atención las decisiones que el país tome en relación con la justicia internacional y sus compromisos diplomáticos.