En una conferencia de prensa matutina celebrada el 2 de agosto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reafirmó su postura de no intervención en las elecciones de Venezuela. El mandatario hizo un llamado a los líderes de otras naciones para que se abstengan de influir en los resultados electorales del país sudamericano, enfatizando que no es legal ni legítimo que otros países favorezcan a algún candidato.
Durante la conferencia, López Obrador fue cuestionado sobre la conversación que sostuvo la tarde anterior con los presidentes de Brasil y Colombia, Lula da Silva y Gustavo Petro, respectivamente. En dicha reunión, los mandatarios discutieron la situación actual en Venezuela y llegaron a un acuerdo para evitar la violencia.
“Nosotros insistimos mucho y se coincidió”, señaló López Obrador. Adicionalmente, se acordó que los cancilleres de los tres países mantendrán una comunicación constante para dar seguimiento a la situación y formular propuestas no intervencionistas.
El presidente mexicano subrayó la importancia de evitar movilizaciones masivas y enfatizó la necesidad de presentar actas que respalden los resultados electorales. “No basta con proclamas, hablando de que se obtuvo el triunfo si no hay actas que prueben el resultado”, afirmó, agregando que la autoridad electoral venezolana se ha comprometido a permitir la verificación de los resultados.
En un comunicado emitido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, se destacó que los tres países coinciden en que las controversias electorales en Venezuela deben resolverse mediante vías institucionales. “El principio fundamental de la soberanía popular debe ser respetado mediante la verificación imparcial de los resultados”, señaló el comunicado. Además, se hizo un llamado a los actores políticos y sociales a actuar con cautela para evitar episodios violentos.
Contexto Internacional
Durante la reunión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), celebrada el 31 de julio en Washington, Colombia y Brasil optaron por abstenerse en la votación sobre la solicitud a Venezuela para la publicación inmediata de las actas electorales, mientras que México decidió no participar en la votación.
López Obrador también hizo un llamado respetuoso a todos los gobiernos para que eviten el intervencionismo, especialmente después de que Estados Unidos reconociera públicamente al candidato Edmundo González como ganador de la elección presidencial de Venezuela el 1 de agosto. “Ningún gobierno está autorizado, no es legal, no es legítimo emitir un fallo dando perdedor o ganador a un candidato de otro país. ¿Qué es eso? No se si pueda agravar, pero no ayuda, lo digo con todo respeto. Es una imprudencia”, concluyó el presidente mexicano.
Con estas declaraciones, México mantiene su firme postura de respeto a la soberanía y la autodeterminación de los pueblos, abogando por procesos electorales transparentes y libres de intervenciones externas.
