La indignación crece entre los habitantes de Lerma debido a la constante invasión de motocicletas en la ciclovía de Avenida Las Partidas, una vialidad exclusiva diseñada para garantizar la seguridad de los ciclistas que a diario se trasladan por la zona. A pesar de las múltiples denuncias de la ciudadanía, el presidente municipal Miguel Ángel Ramírez Ponce ha optado por el silencio, permitiendo que esta situación empeore día con día.
Las ciclovías, ignoradas y convertidas en estacionamiento
La ciclovía fue instalada con el objetivo de proteger a los trabajadores y habitantes que se movilizan en bicicleta, ofreciendo un espacio seguro, libre del tránsito vehicular. Sin embargo, la realidad es otra. Cada vez es más común ver motocicletas estacionadas en plena vía exclusiva, obligando a los ciclistas a salir al arroyo vehicular, poniéndose en grave riesgo.
Esta invasión no solo es una violación al reglamento de tránsito, sino también una muestra clara de falta de empatía por parte de los motociclistas, quienes, pese a contar con cajones de estacionamiento gratuitos justo frente a la ciclovía, prefieren bloquear una vía destinada a la movilidad sustentable.
Miguel Ángel Ramírez Ponce: una omisión preocupante
Lo más alarmante, según denuncian vecinos y ciclistas afectados, es la completa indiferencia del alcalde Miguel Ángel Ramírez Ponce. Las quejas han sido constantes en redes sociales y medios locales, pero la autoridad municipal no ha emitido ni una sola declaración ni ha tomado medidas concretas para frenar esta problemática.
¿Dónde están los agentes de tránsito? ¿Por qué no se aplican sanciones? La omisión del gobierno municipal no solo es decepcionante, sino también peligrosa, ya que envía un mensaje de impunidad que puede alentar aún más conductas irresponsables.
Urge una solución real y compromiso de las autoridades
La ciudadanía no pide mucho: respeto a las normas, vigilancia efectiva y voluntad política. Mientras tanto, la falta de acción de las autoridades municipales pone en entredicho su compromiso con la movilidad segura y el bienestar de quienes optan por una forma de transporte más limpia y eficiente como la bicicleta.
Lerma necesita una respuesta inmediata. No se trata solo de ciclovías bloqueadas, se trata de vidas que están en riesgo ante la pasividad institucional. La inacción de Miguel Ángel Ramírez Ponce es, en este contexto, una forma de complicidad.