En las orillas del Pueblo Mágico de Valle de Bravo, la presa Miguel Alemán se muestra notablemente afectada por una marcada disminución en su nivel de agua, exhibiendo un tono verdoso debido a la presencia de fango y sedimentos. Este fenómeno ha generado preocupación entre prestadores de servicios, artesanos y comerciantes locales, quienes dependen del turismo para subsistir.
Desde el pasado mes de septiembre, la comunidad ha estado haciendo eco de su preocupación, y finalmente, a principios de abril, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tomó medidas para mitigar la situación. A pesar de ello, la presa se encuentra apenas al 26% de su capacidad total, con 104.7 hectómetros cúbicos almacenados, muy por debajo de su nivel normal de 394.3 hectómetros cúbicos.
Este escenario ha impactado severamente al turismo en Valle de Bravo. A solo dos semanas después de la Semana Santa, el Pueblo Mágico luce desolado, con negocios abiertos pero sin visitantes. Las embarcaciones y lanchas, una vez navegando sobre las aguas de la presa, ahora descansan en bordos expuestos por la bajada del nivel del agua.
La preocupación se intensifica con la advertencia de expertos, como el biólogo Hugo Plata Tinoco, quien señaló que el nivel de la presa podría disminuir aún más durante la temporada de estiaje, lo que amenaza la supervivencia de especies como carpas y charales blancos.
Edna Martha San Juan Valenzuela, directora de la Administración del Agua del Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), ha ordenado la inspección de embalses privados en el municipio, dado que no se han encontrado registros de títulos de concesión para su uso.
En respuesta a esta situación, la comunidad espera con ansias el inicio de la temporada de lluvias en mayo para que la presa pueda recuperar su nivel normal. Mientras tanto, los habitantes locales y empresarios mantienen la esperanza de que las medidas tomadas por las autoridades sean efectivas y permitan la restauración de este importante recurso hídrico.
El impacto ambiental y económico de la bajada del nivel de la presa Miguel Alemán en Valle de Bravo es un recordatorio de la importancia de la gestión sostenible del agua y de la necesidad de medidas a largo plazo para preservar nuestros recursos naturales.