En un esfuerzo por proteger y preservar la rica biodiversidad de México, la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) ha asumido una importante responsabilidad en los últimos cinco años: la custodia y atención de más de 35 mil ejemplares de vida silvestre decomisados, rescatados o incautados por la Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente). En este artículo, exploraremos la labor de la AZCARM y el desafío que enfrentan al cuidar de esta diversidad de especies en peligro.
Custodia de la Vida Silvestre:
La emblemática jirafa llamada Benito es solo uno de los miles de animales que han encontrado refugio en las instalaciones de la AZCARM. Durante los últimos cinco años, la Profepa ha confiado en esta asociación para la custodia y cuidado de una asombrosa variedad de especies que van desde aves exóticas hasta felinos majestuosos, rumiantes, monos y reptiles.
El presidente de la AZCARM, Ernesto Zazueta, ha destacado que el compromiso de cuidar de estos animales es monumental en términos de recursos financieros. Las instituciones zoológicas afiliadas a la AZCARM invierten colectivamente alrededor de 180 millones de pesos anuales en la alimentación, cuidados médicos, procedimientos quirúrgicos, especialistas y otros aspectos necesarios para mantener a estas especies en buenas condiciones de salud.
La Responsabilidad de la Conservación:
Más allá de la carga económica, la AZCARM se ha convertido en un pilar fundamental en la conservación de especies en peligro, así como en la educación y la investigación sobre la fauna silvestre. Estas instituciones desempeñan un papel crucial en la preservación de la biodiversidad de México, especialmente en un momento en que los recortes presupuestarios gubernamentales han afectado severamente al sector ambiental.
Ernesto Zazueta subraya la importancia de que tanto la sociedad como las autoridades reconozcan el esfuerzo y la dedicación de la AZCARM. Estas instituciones no solo proporcionan un refugio seguro para animales en apuros, sino que también contribuyen significativamente a la conservación y la conciencia ambiental en el país.
Colaboración para el Rescate:
La labor de rescate de animales en peligro la llevan a cabo las instituciones de la AZCARM en colaboración con personal de la Profepa. La falta de recursos suficientes en esta última entidad ha llevado a la necesidad de una estrecha sinergia con los zoológicos y las Unidades de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre (UMAS) para atender adecuadamente a la fauna silvestre rescatada.
Sin embargo, no todo es un camino sin obstáculos. La Profepa ha enfrentado críticas por su falta de recursos y de personal especializado. El presidente de la AZCARM, Ernesto Zazueta, ha señalado que esta entidad ha perdido a expertos en el área y se ha visto inundada de personas sin experiencia en temas de conservación, lo que ha llevado a ineficiencias en la gestión.
En conclusión, la labor incansable de la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) es un testimonio de su compromiso con la protección de la vida silvestre y la preservación de la biodiversidad en México. A pesar de los desafíos y las críticas, la AZCARM continúa desempeñando un papel crucial en la conservación de especies y la educación ambiental, demostrando que el trabajo conjunto entre organizaciones y autoridades es esencial para asegurar un futuro sostenible para la fauna silvestre de México.