A solo dos días de celebrarse el Día del Niño, los comerciantes de dulces del Mercado Benito Juárez han manifestado su preocupación ante la baja en sus ventas, provocada por la reciente prohibición de comida chatarra en espacios educativos.
Tradicionalmente, en estas fechas, padres de familia y maestros acudían a estos establecimientos para adquirir dulces y golosinas destinados a las celebraciones escolares. Sin embargo, este año la situación ha cambiado drásticamente. De acuerdo con los vendedores, aunque algunos padres han continuado comprando dulces, estos serán entregados fuera de los planteles, en cumplimiento con la normativa vigente.
“Antes veíamos filas de clientes buscando surtirse para las fiestas escolares, pero ahora todo es diferente. Nos preocupa que nuestra mercancía no se logre vender a tiempo”, expresaron varios comerciantes afectados.
Ante las restricciones, los maestros han permitido el ingreso de piñatas y juguetes como parte de los festejos dentro de las aulas. Este cambio ha generado que los dulces sean sustituidos por estos artículos, modificando una tradición profundamente arraigada en el Día del Niño.
Los vendedores aseguran que, aunque han intentado adaptarse ofreciendo nuevos productos, la demanda no es la misma, ya que muchos de sus ingresos dependen directamente de las ventas de dulces en esta temporada especial.
Frente a este panorama, los comerciantes del mercado han solicitado a las autoridades educativas considerar permitir el acceso de dulces durante las celebraciones del próximo 30 de abril, argumentando que un consumo moderado y supervisado podría equilibrar las preocupaciones de salud con las tradiciones culturales.
En conclusión, la comunidad de vendedores permanece en la incertidumbre, esperando que los padres de familia continúen buscando alternativas para festejar a los pequeños sin dejar de lado las dulces tradiciones.
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