El video viral que mostraba a un autobús de pasajeros siendo perseguido por motociclistas en el centro de Toluca generó preocupación entre la ciudadanía, ante la sospecha de un posible intento de asalto. Sin embargo, declaraciones de los pasajeros revelaron una versión distinta de los hechos: el incidente habría comenzado por una agresión vial del chofer hacia los motociclistas.
El 1 de mayo, en plena zona centro de la capital mexiquense, sobre la calle Santos Degollado, un conflicto vial escaló hasta convertirse en una persecución que involucró a cuatro motociclistas y un autobús de transporte público, identificado con el número económico 223.
Según reportes de los pasajeros y una fuente policial, el chofer habría lanzado la unidad contra los motociclistas al intentar avanzar en un punto donde comúnmente los camiones hacen base, aunque esta práctica no está permitida.
“El chofer les aventó el camión, ellos se enojaron y comenzaron a seguirlo y golpear la unidad”, citó la fuente consultada.
En las imágenes que circularon en redes sociales, se observa cómo el autobús avanza sobre Santos Degollado. Una motocicleta amarilla se le adelanta y se cierra frente a él antes de llegar al cruce con Sor Juana Inés de la Cruz. Enseguida, otros motociclistas lo alcanzan, bajan de sus vehículos y comienzan a golpear la unidad, mientras insultan al conductor.
Los pasajeros, visiblemente asustados, comenzaron a gritar pidiendo auxilio y que llamaran a la policía. A pesar de los golpes al autobús, el chofer no abrió las puertas ni se detuvo, y aprovechó un momento para acelerar y continuar su trayecto a más de 70 kilómetros por hora, tratando de evadir a sus agresores.
El operador recorrió varias vialidades, desde Santos Degollado hasta José María Pino Suárez, cruzando puntos como Leona Vicario, Josefa Ortiz de Domínguez y la colonia Pensiones. A pesar de reducir su velocidad en zonas con tráfico o topes, el camión no logró dejar atrás a los motociclistas.
En el cruce con avenida de los Maestros, el semáforo en rojo obligó al autobús a detenerse. Fue en ese momento cuando los motociclistas lo alcanzaron nuevamente y reanudaron los golpes contra el vehículo, sin éxito en hacer que el conductor descendiera. Apenas el semáforo cambió a verde, el chofer reinició su marcha y desapareció hacia la Glorieta a La Marina.
Mientras los pasajeros afirmaron ante las autoridades que no se trató de un intento de asalto, sino de una confrontación provocada por el mal manejo del conductor, este presentó una denuncia formal días después alegando lo contrario: que fue víctima de un asalto frustrado.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México ya investiga los hechos para determinar responsabilidades y esclarecer lo sucedido.
Desde el fin de semana posterior al incidente, elementos de la policía municipal de Toluca mantienen vigilancia constante en el punto donde inició la persecución, justo en la esquina de Santos Degollado e Ignacio López Rayón, a un costado del Cosmovitral, para evitar que situaciones similares se repitan.
Ante la confusión sobre si los agresores eran parte de una banda de asaltantes conocidos como motorratones, la fuente policial fue clara:
“Los motorratones operan de forma rápida, arrebatan celulares o carteras y huyen. No actúan como en este caso, que fue un pleito entre conductor y motociclistas”.
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