La exigencia de justicia por la muerte de Luisa Fernanda, joven que perdió la vida el pasado 30 de octubre tras ser embestida por una patrulla municipal, volvió a tomar fuerza luego de que su madre, Verónica Manjarrez, denunciara públicamente que el agente señalado como responsable enfrenta su proceso en libertad.
Durante una conferencia de prensa, Manjarrez reveló que Eduardo “N”, el policía presuntamente involucrado en el atropellamiento, obtuvo libertad provisional tras cubrir una fianza de 150 mil pesos. De esta manera, el elemento de seguridad continúa su proceso legal fuera del penal, situación que ha generado molestia e inconformidad entre familiares y ciudadanos.
Visiblemente afectada, Verónica Manjarrez calificó como “vergonzosa” la actuación de la policía municipal. Señaló que, además de una presunta falta de disciplina y capacitación en la corporación, existió una movilización sospechosa tras el accidente.
De acuerdo con su testimonio, más de 50 policías habrían llegado al lugar del incidente y varios de ellos retiraron objetos de la patrulla implicada, lo que para la familia constituye un posible encubrimiento institucional.
Manjarrez responsabilizó directamente al Ayuntamiento de Toluca al sugerir que hubo manipulación de la escena del accidente. Aunque las autoridades no han confirmado estas versiones, la madre de Luisa Fernanda insiste en que existen acciones irregulares que deben ser investigadas, así como probables responsabilidades adicionales entre los elementos que acudieron al sitio.
Aunque la Fiscalía y la policía municipal no han emitido información que confirme si Eduardo “N” conducía bajo los efectos del alcohol, la familia subrayó que testigos del hecho afirman que el agente estaba en estado de ebriedad al momento del atropellamiento.
Esta versión ha reforzado la exigencia de justicia y ha encendido la indignación social ante la percepción de impunidad.
La familia Manjarrez fue contundente al asegurar que no aceptarán indemnización económica por la muerte de Luisa Fernanda. Su postura es clara: buscan que el responsable directo sea sentenciado a prisión, y que también se procese a cualquier elemento policial involucrado en un posible encubrimiento.
“Lo único que queremos es justicia. No estamos en venta”, destacó Verónica Manjarrez.
Además, la madre de la víctima informó que el seguro de la patrulla intentó contactar a la familia de Lucero, la joven que acompañaba a Luisa Fernanda y que resultó gravemente herida. Según la denuncia, se les habría propuesto desistirse de la denuncia a cambio de trasladarla a otro hospital.
La familia de Lucero rechazó la oferta, al considerarla inapropiada y carente de sensibilidad ante la gravedad del caso.
El caso continúa generando indignación pública en Toluca, donde colectivos feministas, organizaciones civiles y ciudadanos han comenzado a exigir transparencia en la investigación y castigo para los responsables.
Mientras tanto, la familia de Luisa Fernanda mantiene su postura firme: no descansarán hasta que las autoridades garanticen que no habrá impunidad en el proceso.
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