El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) ha implementado medidas cautelares contra Martí Batres, actual jefe de Gobierno de la CDMX. Esta acción busca frenar acciones que podrían poner en riesgo la equidad y transparencia del próximo proceso electoral.
Según fuentes del IECM, la resolución surge como respuesta a conductas atribuidas a Batres, que incluyen la promoción personalizada y el uso indebido de recursos públicos, así como la vulneración de los principios de imparcialidad, neutralidad y equidad en la contienda electoral en curso.
La medida exige a Batres abstenerse de emitir comentarios o realizar acciones que puedan influir de manera indebida en la opinión pública o en el desarrollo del proceso electoral. Santiago Taboada, candidato a la Jefatura de Gobierno por la coalición “Va X La CDMX”, ha señalado que Batres debe considerarse notificado de esta resolución por los medios de comunicación, añadiendo que de ser necesario, se le hará llegar formalmente a través de redes sociales.
Federico Döring, coordinador de la campaña de Taboada, enfatizó la gravedad de no acatar las medidas impuestas, señalando que podría ser causal de nulidad de la elección. Döring insinúa que cualquier desacato por parte de Batres sugeriría una confesión implícita de que su partido no tiene la confianza de ganar la elección dentro del marco legal y ético requerido.
Por otro lado, Andrés Sánchez, representante del PAN ante el IECM, ha expresado preocupación por lo que considera señales alarmantes de intervencionismo electoral por parte del jefe de Gobierno, especialmente después de que Taboada se impusiera en el debate reciente contra Clara Brugada. Sánchez señala el uso de recursos públicos en beneficio de ciertas candidaturas como una amenaza directa a la integridad del proceso electoral.
Verónica Juárez, candidata al Senado de la República, ha visto en estas medidas un paso adelante hacia la realización de elecciones libres y justas. Juárez apela a la responsabilidad del jefe de Gobierno y su gabinete de adherirse a la legalidad, esperando que este caso sirva de ejemplo para evitar la intervención indebida en el proceso electoral, incluso a nivel federal.
Este conjunto de medidas y declaraciones resalta la tensión y los retos que enfrenta el proceso electoral de la Ciudad de México. Mientras los ojos de la nación se vuelven hacia este evento democrático, la imposición de estas cautelares por parte del IECM subraya la importancia de mantener un campo de juego equitativo para todas las partes involucradas, asegurando así la confianza en el sistema electoral y en sus resultados.