¿Es necesario fortalecer la legislación para la protección de los seres sintientes?: Dr. Héctor Macedo García, Magistrado del Poder Judicial del Estado de México

En un avance significativo para el bienestar animal, la Ciudad de México ha reformado su Ley de Protección y Bienestar de los Animales. Esta modificación refleja un cambio de perspectiva en la relación entre humanos y animales, estableciendo medidas legales más estrictas y una regulación ética hacia los seres sintientes en la capital.

La nueva legislación introduce el término “tutores responsables” en lugar de “dueños” y restringe el uso de la eutanasia solo a casos en los que sea médicamente necesario. Además, endurece las sanciones contra el maltrato, regula el comercio de animales, prohíbe su uso en protestas y espectáculos, y fomenta la cooperación entre instituciones para mejorar la protección animal. Otro cambio significativo es el uso de la denominación “animales de compañía” en lugar de “animales domésticos”, destacando así el vínculo afectivo entre las personas y sus animales.

Con el fin de facilitar el acceso a servicios veterinarios y garantizar la atención animal, la reforma también contempla la creación de Centros de Atención Canina y Felina y Clínicas Veterinarias en distintas alcaldías. Estas nuevas instalaciones buscan asegurar una atención adecuada y continua para los animales de compañía en la Ciudad de México, promoviendo así un trato ético y digno hacia ellos.

A nivel mundial, varios países ya han implementado marcos legislativos sólidos en defensa de los derechos de los animales. Suiza, por ejemplo, regula estrictamente la cría, el transporte y el sacrificio de animales, mientras que Colombia reconoce a los animales como seres sintientes, prohibiendo el maltrato y la explotación. Estos modelos exitosos sirven como referencia para que México fortalezca su legislación en favor de los animales, posicionándose como un país comprometido con los valores éticos de respeto y justicia hacia todos los seres vivos.

Fortalecer la protección de los seres sintientes no solo responde a la compasión, sino también a un acto de justicia y de respeto hacia aquellos que comparten nuestro entorno. Este avance legislativo en la Ciudad de México representa un paso importante en el camino hacia una sociedad más consciente y responsable con el bienestar de los animales.