En Ixtapaluca, Estado de México, el pasado viernes 10 de mayo por la tarde, un grupo armado irrumpió en una celebración del Día de la Madre, dejando un saldo de tres mujeres fallecidas y seis personas más heridas. La festividad familiar, que tenía lugar en la calle José Chávez de la colonia La Cañada, se vio abruptamente interrumpida por la violencia inesperada.
Según los informes preliminares de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM), los atacantes, cuyas identidades aún se desconocen, abrieron fuego contra los asistentes antes de darse a la fuga. Las autoridades locales, en colaboración con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y la Policía Municipal, están llevando a cabo una investigación interinstitucional para esclarecer los hechos y dar con los responsables.
Los servicios de emergencia, incluido el personal de la Estación Central de Protección Civil y Atención a Riesgos de Ixtapaluca, confirmaron la muerte de tres mujeres en el lugar de los hechos. Además, se recuperaron casquillos percutidos de calibres .9 mm y .223 mm, evidencia de la gravedad del ataque. Las seis personas heridas fueron trasladadas por sus propios medios a centros médicos para recibir la atención necesaria.
La escena del crimen ha sido cuidadosamente preservada siguiendo los protocolos establecidos para permitir una investigación adecuada. Este incidente ha provocado una ola de consternación en la localidad y plantea serias preguntas sobre la seguridad en eventos familiares públicos, especialmente durante fechas significativas como el Día de la Madre.
Las autoridades han hecho un llamado a la comunidad para que cualquier persona con información que pueda ser relevante para el caso se presente y coopere con los investigadores. Mientras tanto, la comunidad de Ixtapaluca y los familiares de las víctimas esperan justicia y respuestas, reforzando la necesidad de una mayor seguridad y medidas preventivas en la región.
Este ataque no solo ha dejado un saldo de víctimas, sino que también ha sembrado el temor entre los residentes de la zona, preocupados por la escalada de violencia y la seguridad de sus eventos comunitarios. La colaboración entre las diferentes agencias del estado es crucial para restaurar la tranquilidad y garantizar que incidentes de esta naturaleza no se repitan.