El Día de Muertos es una de las festividades más importantes en México, y en el mes de octubre, los hogares mexicanos se llenan de aromas característicos como el cempasúchil, el chocolate caliente y la fruta de temporada. Estos elementos son fundamentales en las ofrendas que se preparan para honrar a los seres queridos que han fallecido. Con la cercanía de la celebración, las familias comienzan a acudir a los mercados locales para adquirir los alimentos que decorarán sus altares.
Cada año, el costo de las frutas de temporada que se colocan en las ofrendas varía ligeramente, pero se mantiene dentro de un rango accesible para la mayoría de las familias. Este año, se estima que el gasto por las frutas será de entre $150 y $200. Las frutas que se suelen colocar en el altar son aquellas que estaban entre las favoritas del difunto o las que son propias de la temporada. Entre las más populares se encuentran las naranjas, mandarinas, guayabas, plátanos y manzanas.
De acuerdo con un recorrido por diferentes mercados y tianguis del Valle de Toluca, estos son los precios aproximados de las frutas de temporada:
- Manzana: Entre $25 y $35 por kilo
- Plátano: $15 por kilo
- Naranja: 2 kilos por $25
- Guayaba: 2 kilos por $25
- Mandarina: Desde $18 hasta $40 por kilo, dependiendo del tamaño
Es importante mencionar que estos precios pueden variar según la ubicación y el mercado específico donde se adquieran los productos. En general, los precios tienden a ser más económicos en los mercados y tianguis locales, en comparación con los supermercados.
Además de las frutas, hay otros alimentos que suelen estar presentes en las ofrendas del Día de Muertos. Entre ellos se encuentran los cacahuates, que se venden en bolsas de aproximadamente un cuarto de kilo, con precios que oscilan entre $20 y $35. También es común ver tejocotes, que suelen venderse por vaso, a $20 cada uno.
Otros alimentos de temporada que se pueden encontrar en los altares incluyen jicama, calabaza y camote, cuyo precio ronda los $20 por kilo.
Vendedores de mercados locales invitaron a las personas a optar por comprar en estos espacios, en lugar de adquirir sus productos en supermercados. Comprar local no solo ayuda a mantener las tradiciones vivas, sino que también apoya a los pequeños productores y comerciantes de la región.
En conclusión, el Día de Muertos es una festividad que celebra la vida y recuerda a los seres queridos que han partido. Preparar una ofrenda es una tradición que conecta a las familias con sus raíces y les permite rendir homenaje a sus ancestros. Este año, a pesar de las variaciones en los precios, sigue siendo posible encontrar frutas y otros alimentos tradicionales a precios accesibles en los mercados y tianguis del Valle de Toluca.
Para las familias que buscan ahorrar, siempre es una buena idea recorrer diferentes puntos de venta y comparar precios. Y, sobre todo, apoyar el comercio local, que ofrece productos frescos y contribuye al sustento de las familias de la región.
