La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró este domingo que los narcocorridos no están prohibidos en México, en respuesta a la polémica generada por el incidente en la Feria de Texcoco, donde el cantante Luis R. Conriquez fue agredido por negarse a interpretar este tipo de canciones durante su presentación en el palenque.
Durante una breve entrevista con medios locales en el marco de un evento de entrega de viviendas en Aguascalientes, Sheinbaum fue clara al decir que su gobierno no busca censurar, sino fomentar contenidos musicales con mensajes positivos.
“No están prohibidos, eso es importante. No los prohibimos. Lo que queremos es promover que la música tenga otros contenidos. Y todos tenemos que ir promoviendo eso”, expresó la mandataria.
La declaración de Sheinbaum ocurre luego del incidente del viernes en el palenque de la Feria de Texcoco 2025, donde Luis R. Conriquez fue objeto de agresiones por parte de asistentes al concierto, quienes reaccionaron violentamente tras la negativa del artista a cantar narcocorridos.
Videos difundidos en redes sociales muestran cómo el público lanzó bebidas y objetos al escenario, obligando al cantante y a su equipo a retirarse apresuradamente a los camerinos para resguardarse.
A través de un comunicado publicado el sábado, Conriquez lamentó los hechos y explicó que su decisión respondió a una voluntad de acatar las recomendaciones del gobierno federal respecto al contenido de las canciones.
“Me apego a las nuevas normas que el gobierno solicita respecto a la interpretación de corridos”, señaló el intérprete, quien también admitió que se trata de una situación complicada, pues los corridos han sido una parte fundamental de su trayectoria musical.
El cantante aseguró que realizará cambios significativos en las letras de sus canciones, y agradeció a su público por el apoyo mostrado a lo largo de su carrera.
Los narcocorridos son una vertiente del género regional mexicano que relata historias relacionadas con el narcotráfico, el poder, el dinero, las armas y la violencia. Si bien para muchos forman parte de una expresión cultural arraigada, otros consideran que este tipo de música glorifica la figura del criminal y fomenta la apología del delito.
En los últimos años, este tipo de canciones ha sido objeto de críticas debido al contexto de inseguridad y violencia vinculada al crimen organizado que afecta a diversas regiones del país.
Como parte de su estrategia para combatir los mensajes violentos en la música, la presidenta lanzó recientemente el concurso musical “México canta y encanta”, una iniciativa que busca inspirar a los jóvenes tanto en México como en Estados Unidos a componer canciones sin violencia y a usar la música como una herramienta para combatir las adicciones y reconstruir el tejido social.
“Estamos en contra de prohibir y censurar, pero sí queremos promover otros contenidos”, reiteró Sheinbaum, haciendo énfasis en la necesidad de impulsar alternativas que alejen a las nuevas generaciones de la cultura del narco.
La controversia en torno a los narcocorridos no es exclusiva de México. A principios de abril, el gobierno de Estados Unidos revocó las visas de trabajo y turismo del grupo Los Alegres del Barranco, después de que se proyectaran imágenes del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), conocido como “El Mencho”, durante sus conciertos en Jalisco y Michoacán.
En conclusión, cabe recordar que el CJNG fue recientemente designado como una organización terrorista extranjera por el Departamento de Estado de EE. UU., junto con grupos como el Cártel de Sinaloa y la Mara Salvatrucha (MS-13).