El Estado de México se mantiene entre las entidades con mayor número de diagnósticos de VIH en el país. De acuerdo con cifras del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), los municipios de Ecatepec, Nezahualcóyotl, Amecameca, Ixtapaluca, Naucalpan y Toluca concentran la mayor incidencia de casos, lo que ha motivado una intensificación de las estrategias de prevención y atención en la entidad.
Ante este panorama, el gobierno municipal de Toluca ha redoblado esfuerzos en materia de salud pública, enfocándose en la prevención, detección y tratamiento oportuno del VIH.
Entre las principales acciones se encuentra la difusión de información confiable, la aplicación de pruebas rápidas y confidenciales, y la coordinación con dependencias estatales para garantizar que las personas diagnosticadas tengan acceso gratuito al tratamiento antirretroviral.
Estas medidas buscan reducir el estigma social que todavía rodea al virus y fomentar la detección temprana, una herramienta fundamental para mejorar la calidad de vida de quienes viven con VIH.
Centros CAPASITS: atención integral y apoyo comunitario
A nivel estatal, el ISEM opera seis Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención en Sida e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS), los cuales ofrecen un modelo de atención integral que incluye:
-
Diagnóstico oportuno.
-
Suministro gratuito de medicamentos antirretrovirales.
-
Acompañamiento psicológico y nutricional.
-
Programas de educación y orientación sexual.
Estos centros funcionan como pilares en la lucha contra el VIH en el Estado de México, brindando apoyo a cientos de personas que cada año reciben un diagnóstico positivo.
Aunque no existen cifras desglosadas por comunidad, el municipio de Toluca ha sido identificado como una de las zonas de alta incidencia. Por ello, las brigadas de salud y unidades móviles recorren diversas localidades del municipio, llevando información, orientación y pruebas gratuitas a la población.
El objetivo principal es acercar los servicios de salud a quienes más lo necesitan, especialmente en zonas con mayor vulnerabilidad social o acceso limitado a servicios médicos.
Expertos y organizaciones civiles coinciden en que la educación sexual integral y la prevención son las herramientas más efectivas para disminuir los nuevos casos de VIH.
El acceso a pruebas gratuitas y confidenciales permite que las personas conozcan su estatus serológico y, en caso necesario, comiencen un tratamiento oportuno.
Además, la colaboración entre autoridades de salud, sociedad civil y comunidades resulta clave para fortalecer la respuesta ante esta situación y garantizar una atención libre de discriminación.
En conclusión, la lucha contra el VIH en el Estado de México no solo implica atención médica, sino también un cambio cultural hacia la inclusión, el respeto y la información veraz.
Las acciones emprendidas por el ISEM y los municipios con mayor incidencia buscan construir una sociedad más consciente y solidaria, en la que las personas que viven con VIH puedan hacerlo con dignidad, acceso a la salud y sin estigma.