Ante el evidente deterioro de la carretera Toluca-Naucalpan y la falta de respuesta por parte de las autoridades federales, el Parque Industrial Toluca 2000 anunció una inversión de 3 millones de pesos para el mantenimiento de vialidades internas y accesos estratégicos al complejo.
Rogelio Argüelles Madrigal, director general de la Asociación de Propietarios del Parque, indicó que la situación de la carretera ha empeorado con la temporada de lluvias, generando afectaciones directas al personal y transporte de carga.
“Nos enfocaremos en los puntos más críticos. Si lo hacemos todo, luego querrán que reparemos toda la carretera. Pero no podemos quedarnos de brazos cruzados”, aseguró.
Uno de los tramos más afectados se encuentra en la incorporación a los carriles centrales de la carretera, justo a la salida del parque industrial, pasando la zona conocida como “la pasada del Árbol”. Los enormes baches en esa área provocan severos embotellamientos, alargando el tiempo de salida hasta una hora para trabajadores y transportistas.
Si bien el ayuntamiento de Toluca ha enviado brigadas para trabajos de bacheo temporal, el mantenimiento formal corresponde a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), dependencia que actualmente enfrenta limitaciones presupuestales.
A pesar de los anuncios realizados meses atrás por la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la liberación de recursos para la reparación de carreteras federales, hasta la fecha no se han ejecutado acciones contundentes en este tramo carretero.
Las intervenciones actuales se limitan al uso de asfalto en frío, un material que se aplica de forma rápida pero cuya durabilidad es mínima.
“Ese asfalto funciona solo en hoyos pequeños, y lo están aplicando en baches grandes. Con la siguiente lluvia, se vuelve a levantar”, explicó Argüelles.
Además de los accesos federales, las vías estatales cercanas al Parque Toluca 2000 enfrentan condiciones similares. El puente vehicular de Boulevard Aeropuerto y José López Portillo, por ejemplo, presenta deterioro avanzado, afectando tanto a vehículos pesados como al transporte de personal.
En su momento, la Secretaría de Desarrollo Económico del Estado de México (Sedeco) intentó coordinar esfuerzos con la Junta Local de Caminos, aunque legalmente estas acciones no están dentro de su competencia directa.
Anticipándose al impacto de las lluvias, el Parque Industrial implementó acciones preventivas para mitigar daños: limpieza de drenajes, uso de maquinaria especializada para desazolve y revisión de tuberías con un robot que detecta infiltraciones por raíces, problema común que puede dañar la infraestructura subterránea.
El caso del Parque Industrial Toluca 2000 refleja una problemática frecuente en el país: la infraestructura pública abandonada por las autoridades, que obliga al sector privado a intervenir con recursos propios para mantener operativas las vías de comunicación.
En conclusión, mientras los compromisos gubernamentales siguen sin materializarse, los empresarios del parque han optado por actuar de forma inmediata, priorizando la seguridad vial y la movilidad laboral de miles de trabajadores.
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