En la Secretaría de Desarrollo Urbano e Infraestructura, las sombras de la corrupción y los abusos laborales parecen extenderse sin control. Recientes denuncias señalan directamente a Mariana Campos Reyes, Coordinadora Administrativa de la dependencia, como una de las principales responsables de una serie de irregularidades que, de confirmarse, podrían significar un grave escándalo para la institución y sus altos mandos.
Acusaciones de ascensos inmerecidos y duplicación de sueldos
Las voces dentro de la Secretaría afirman que Mariana Campos Reyes ha estado promoviendo a personas sin los méritos necesarios para ocupar posiciones clave, donde los sueldos se duplican de manera alarmante. Este aparente favoritismo responde, según los denunciantes, a las directrices de Felipe Leonides Linares, director de Administración, quien estaría manipulando estas promociones para beneficiar a sus allegados, generando un ambiente de inequidad y malestar entre el personal que sí cuenta con la preparación y experiencia necesarias.
Despidos injustificados: una práctica preocupante
La situación se torna aún más grave con las acusaciones de despidos injustificados, que se estarían disfrazando bajo la modalidad de “renuncia voluntaria”. Los empleados afectados aseguran que estas acciones se llevan a cabo bajo la excusa de cumplir con las instrucciones del secretario Carlos Maza Lara, lo cual, de ser cierto, revelaría una cadena de complicidad y autoritarismo al interior de la Secretaría.
Nerviosismo por las auditorías y posibles maquillajes contables
Como si lo anterior no fuera suficiente, el clima dentro de la Secretaría se ha vuelto tenso ante la realización de auditorías internas. La preocupación no es infundada, pues se rumora que las cuentas de diversas áreas, especialmente las de recursos materiales y mantenimiento de obra e infraestructura urbana, han sido meticulosamente maquilladas para esconder irregularidades que podrían ser devastadoras si salen a la luz.
Estas auditorías, que en teoría deberían servir para aclarar el manejo de los recursos públicos, podrían, en cambio, destapar un entramado de corrupción que involucre a múltiples niveles de la administración. Se espera que las autoridades competentes pongan especial atención en estas áreas, donde los denunciantes aseguran que las irregularidades son más severas.
El secretario Carlos Maza Lara tiene la obligación de intervenir de manera inmediata para esclarecer estas graves acusaciones. Si bien el refrán dice que “cuando el río suena, agua lleva”, en este caso, el ruido es ensordecedor. La transparencia y la justicia deben prevalecer en una institución que tiene bajo su responsabilidad el desarrollo urbano y la infraestructura de nuestra comunidad.
Notidex seguirá de cerca el desarrollo de esta situación, en espera de que las autoridades actúen con la prontitud y seriedad que el caso amerita. La ciudadanía merece saber la verdad sobre lo que sucede dentro de la Secretaría de Desarrollo Urbano e Infraestructura, y sobre todo, merece ver un cambio que ponga fin a los abusos y la corrupción.
