La Iglesia exige justicia por Jesuitas asesinados hace dos años

Papa Francisco
Papa Francisco

La Iglesia católica mexicana ha hecho un llamado urgente a la nación para intensificar la denuncia de la violencia y la impunidad que asolan al país. Este llamado se produce en el marco del segundo aniversario del asesinato de los jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, quienes perdieron la vida el 20 de junio de 2022 en el estado de Chihuahua.

Un Trágico Suceso en Cerocahui

Los jesuitas, de 79 y 80 años respectivamente, fueron asesinados mientras intentaban proteger a un guía de turistas que huía de personas armadas. Este trágico evento tuvo lugar en la iglesia de Cerocahui, un lugar donde los sacerdotes dedicaban su vida al servicio de las comunidades de la Sierra Tarahumara. La Arquidiócesis de México, en su editorial del semanario ‘Desde la fe’, expresó que estas muertes se suman a una extensa lista de actos violentos y desapariciones que han marcado al país en las últimas décadas.

La editorial enfatizó la necesidad de levantar la voz con mayor fuerza contra la violencia y la impunidad en México. “Nos han urgido a exigir acciones inmediatas y eficaces para dejar de sentirnos inseguros, para tener justicia y verdad, para alcanzar la tan ansiada paz”, se lee en el documento.

Desde la tragedia, la comunidad religiosa ha promovido múltiples iniciativas, incluyendo jornadas de oración, foros y el Diálogo Nacional por la Paz en septiembre de 2023. Estas actividades culminaron en la creación de la Agenda Nacional de Paz y los Compromisos por la Paz, firmados por los principales candidatos presidenciales de las elecciones del pasado 2 de junio, incluyendo a la presidente electa, Claudia Sheinbaum.

Compromiso con la Paz

El llamado de la Arquidiócesis es claro: continuar el diálogo y trabajar con aquellos que han firmado los ‘Compromisos por la Paz’. Enfatizan que la construcción de la paz es un proceso continuo que requiere el esfuerzo conjunto de todos los sectores de la sociedad.

En la misa de cuerpo presente para los sacerdotes asesinados, los religiosos jesuitas instaron al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a revisar su estrategia de seguridad, subrayando la gravedad de la violencia en el país. En respuesta, López Obrador prometió una investigación exhaustiva del doble asesinato.

Más Allá de la Captura

Sin embargo, la Arquidiócesis subrayó que la captura de un líder del crimen organizado no es suficiente para resolver la violencia en México. La Iglesia insiste en que es necesario un enfoque integral y sostenido para abordar las raíces de la violencia y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.


La sangre derramada en Cerocahui y el sufrimiento de las víctimas de la violencia en México continúan siendo una herida abierta que compromete a la Iglesia y a la sociedad en su conjunto. La construcción de la paz es una tarea sin tregua que exige el compromiso inquebrantable de todos los mexicanos.

La Iglesia católica mexicana reafirma su compromiso con la justicia, la verdad y la paz, instando a la nación a no cesar en la búsqueda de un país seguro y en paz para todos.