La Cámara Nacional de Comercio, Servicios Turísticos (Canaco-Servytur) del Valle de Toluca ha manifestado una postura favorable hacia los aumentos sostenidos del salario mínimo implementados desde el sexenio anterior y que continúan bajo el actual gobierno federal. Sin embargo, advierte que estos incrementos deben acompañarse de un paquete de estímulos fiscales para evitar un impacto negativo en los empresarios, según declaró Fernando Reyes Muñoz, presidente del organismo.
La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) ha aprobado un salario mínimo diario de 248.93 pesos hasta el 31 de diciembre de 2024, el cual aumentará a 278.80 pesos para 2025. En la Zona Libre de la Frontera Norte, este monto pasará de 374.89 pesos a 419.88 pesos. Estos ajustes buscan mejorar las condiciones económicas de las familias mexicanas.
Fernando Reyes Muñoz ha enfatizado que, aunque los incrementos son una medida positiva para los trabajadores, también presentan un desafío para las empresas.
“Es muy fácil pasar la estafeta, pero si esto no viene acompañado de estímulos fiscales, me parece que se corre el gran riesgo de estrangular a esa parte que está cautiva y eso puede llegar a propiciar la informalidad”, advirtió Reyes.
Además, el empresario cuestionó si estos incrementos han contribuido efectivamente a una mejor calidad de vida para los trabajadores, dado el impacto de la inflación y los constantes aumentos en los precios de los productos básicos.
“Es necesario analizar si estas medidas han cumplido su objetivo de mejorar las condiciones de vida de los empleados”, agregó.
El presidente de Canaco-Servytur ha propuesto que, para evitar el estrangulamiento financiero de las empresas, se implementen incentivos fiscales que permitan a los empresarios adaptarse a los cambios. Esto no solo beneficiaría a los patrones, sino también ayudaría a prevenir un aumento en la informalidad laboral, que podría surgir como una consecuencia no deseada de los aumentos salariales.
En cuanto a la posible disminución de la jornada laboral, Reyes Muñoz instó a realizar un análisis exhaustivo que involucre a todos los sectores.
“Debe convertirse en un círculo virtuoso donde todos ganen: el gobierno municipal, estatal, federal, el trabajador y la clase empresarial. Son temas por abordarse desde un todo y no desde un interés individual”, señaló.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reafirmó durante su campaña y al asumir el cargo, su compromiso de aumentar el salario mínimo a 15 mil pesos mensuales. Este objetivo busca ser una medida transformadora para la economía del país, pero también representa un reto para el sector empresarial, al que ha invitado a colaborar para alcanzar esta meta.
En conclusión, el aumento del salario mínimo en México es una medida que ha sido bien recibida por los sectores laborales y empresariales en general. Sin embargo, para que esta acción sea sostenible, es crucial que se integre con políticas fiscales que apoyen a los empresarios. Además, temas como la disminución de la jornada laboral deben ser analizados con una perspectiva integral que garantice beneficios equitativos para todos los actores involucrados.
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