Toluca, Méx. La emblemática avenida Paseo Colón podría enfrentar una transformación drástica. Al menos 50 árboles presentan daños severos provocados por el gusano barrenador y por el deterioro natural asociado a su avanzada edad, según informó Octavio Chávez Negrete, delegado de la colonia Colón.
De acuerdo con el delegado, la presencia del gusano barrenador fue detectada desde hace varios meses en diversos puntos de la vialidad. El tramo más afectado comprende desde el Ranchito hasta la vialidad Las Torres, donde el deterioro del arbolado es más evidente.
Chávez Negrete advirtió que la combinación del ataque de la plaga con el desgaste acumulado durante décadas ha debilitado de manera significativa la masa arbórea. La situación, dijo, obliga a considerar el retiro de los ejemplares afectados para evitar riesgos a peatones, automovilistas y negocios.
“Cuando tengamos que retirar esos 50 árboles, la imagen de la avenida cambiará por completo. Habrá que empezar un proceso de reforestación con ejemplares de buen tamaño para conservar el carácter de Paseo Colón”, señaló.
La pérdida de estos árboles no solo representa un impacto ambiental, sino también estético. La avenida está catalogada como la tercera más bella de México, únicamente por debajo de Paseo de la Reforma en CDMX y Paseo Montejo en Mérida. Por ello, la recuperación de la masa vegetal será fundamental para mantener su identidad visual y paisajística.
Además de la crisis ambiental, la colonia enfrenta otro desafío: la falta de un albergue adecuado para las familias de niñas y niños que reciben tratamiento en el Hospital para el Niño.
Chávez Negrete afirmó que diariamente llegan personas sin recursos suficientes para pagar hospedaje. El albergue actual resulta insuficiente, por lo que muchas familias deben permanecer en la calle mientras esperan noticias de sus hijos.
El delegado propuso aprovechar el terreno de una plaza cercana que actualmente se encuentra en abandono para construir un espacio digno que incluya camas, sanitarios y áreas de descanso.
Mientras tanto, otro conflicto se desarrolla en la zona. La falta de sanciones ha llevado a algunos automovilistas a utilizar la avenida como estacionamiento, especialmente en áreas cercanas a restaurantes. De acuerdo con testimonios, algunos vehículos permanecen ahí por largos periodos, afectando el tránsito y la movilidad.
Los vecinos han manifestado su inconformidad, aunque la delegación aseguró que muchos de estos conductores estacionan sus autos ahí por necesidad ante la falta de alternativas formales.
La situación de Paseo Colón combina retos ambientales, sociales y de movilidad. El retiro de decenas de árboles abrirá un proceso de regeneración ambiental imprescindible; al mismo tiempo, las familias de pacientes requieren un espacio digno y seguro durante las horas o días que permanecen en espera.
Las autoridades auxiliares han pedido apoyo de dependencias estatales y municipales para atender ambos problemas antes de que la situación se agrave.
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