El Producto Interno Bruto (PIB) en México mostró un crecimiento económico del 1,1% en el segundo trimestre del año en comparación con el mismo trimestre del año anterior, según datos preliminares publicados por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi). Este incremento, aunque modesto, marca el séptimo trimestre consecutivo de caídas en el crecimiento económico del país.
Durante el primer trimestre, la variación anual del PIB fue del 1,9%, mientras que, a tasa trimestral, el crecimiento fue del 0,2%, en comparación con el 0,3% del trimestre anterior. Estos datos reflejan una desaceleración en el ritmo de crecimiento económico del país.
En el segundo trimestre de este año, la construcción jugó un papel crucial en la recuperación parcial de la producción industrial. Sin embargo, los servicios y el sector agropecuario experimentaron caídas significativas. El sector agropecuario, en particular, fue severamente afectado por las fuertes sequías que azotaron al país durante el verano.
Perspectivas Económicas
Analistas de Citibanamex, incluyendo a Iván Arias, Rodolfo Ostolaza y Fernando Monreal, han señalado varios factores que podrían influir en el desempeño económico de México en la segunda mitad del año. Entre estos factores se incluyen:
- Desaceleración de la economía estadounidense
- Menor generación de empleos
- Contracción del gasto público
- Altos niveles de tasas de interés
- Menor confianza empresarial
Proyecciones de Crecimiento
Citibanamex espera que la economía mexicana cierre el año con un crecimiento del 1,9%. No obstante, los analistas advierten sobre varios riesgos a la baja, como una posible desaceleración mayor de la economía estadounidense, un deterioro en el ambiente de inversión debido a decisiones políticas en México y Estados Unidos, y una consolidación fiscal abrupta.
Balance de Riesgos
Los economistas de Citibanamex también identificaron efectos positivos derivados de las tendencias de relocalización (nearshoring), los cuales podrían superar las estimaciones actuales y representar un impulso para el crecimiento económico. A pesar de esto, consideran que el balance de riesgos está sesgado a la baja, lo que sugiere que la economía podría enfrentar más desafíos que oportunidades en el corto plazo.
En conclusión, el crecimiento del PIB en México durante el segundo trimestre muestra señales mixtas. Mientras que algunos sectores como la construcción están ayudando a impulsar la economía, otros como los servicios y el agropecuario enfrentan retos significativos. Las perspectivas económicas para el resto del año están marcadas por una combinación de factores internos y externos, lo que hace necesario un monitoreo constante de las condiciones económicas y políticas tanto nacionales como internacionales.
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