En medio de las preocupaciones y la incertidumbre que rodean al Instituto Tecnológico de Toluca tras el inicio de un “paro de brazos caídos” hace casi un mes, surge una voz de esperanza. El personal docente de esta institución, perteneciente al Tecnológico Nacional de México, ha emitido un comunicado que trae un mensaje claro: el semestre académico todavía puede salvarse.
Marzo marcó el comienzo de una huelga pacífica liderada por profesores y apoyada por estudiantes, con el objetivo de hacer eco de sus demandas ante la administración central del Tecnológico Nacional de México. La principal reivindicación es la destitución de Hugo Ernesto Cuéllas Carreón, el actual director, cuya gestión ha sido ampliamente cuestionada por la comunidad educativa debido a escándalos de corrupción y misoginia. A 26 días de iniciada esta protesta, los docentes recalcan que, debido a la estructura del calendario escolar y los días efectivamente perdidos, el semestre aún puede considerarse en marcha.
De los 26 días transcurridos desde el inicio del paro, solamente 15 han sido de inactividad académica real, tomando en cuenta el período vacacional oficial del 26 de marzo al 5 de abril, respaldado por la Secretaría de Educación Pública (SEP). Esta precisión matemática ofrece un atisbo de esperanza: aún hay margen para recuperar el tiempo perdido sin comprometer la calidad educativa ni el aprendizaje de los estudiantes.
La situación ha llegado a un punto crítico donde la falta de diálogo y respuesta por parte de las autoridades ha movido a la comunidad estudiantil a organizar una marcha pacífica. Este evento, programado para el próximo 9 de abril a las 8:00 AM, busca visibilizar la problemática y urgir a los directivos a tomar acciones concretas para resolver el conflicto.
En Notidex, entendemos la importancia de mantener informada a nuestra comunidad sobre los eventos que impactan el sector educativo. Este caso, que involucra al Instituto Tecnológico de Toluca, no solo resalta la importancia de la comunicación y la gestión efectiva en las instituciones educativas sino también el poder de la unidad estudiantil y docente frente a adversidades. La resolución de esta situación podría sentar un precedente significativo para el manejo de conflictos similares en el futuro.
Mientras tanto, la esperanza permanece intacta entre los miembros de la comunidad educativa del Tecnológico de Toluca. El mensaje es claro: aún hay tiempo para salvar el semestre, siempre y cuando se tomen las medidas necesarias para atender las demandas de estudiantes y docentes. La próxima marcha pacífica será un momento crucial en esta lucha por la justicia y la calidad educativa.
