Los frijoles han sido un alimento básico en la dieta de los mexicanos durante siglos, no solo por su sabor y versatilidad en la cocina, sino también por sus múltiples beneficios para la salud. María Amanda Gálvez Mariscal, investigadora de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), destaca que los frijoles son un alimento altamente funcional gracias a sus nutrientes y componentes biológicamente activos que pueden mejorar la salud y reducir el riesgo de diversas enfermedades.
Beneficios Nutricionales de los Frijoles
Los frijoles son una excelente fuente de vitaminas esenciales. Contienen niacina, que es importante para el mantenimiento de la piel, los nervios y los órganos digestivos. También son ricos en riboflavina, una vitamina que favorece la salud ocular y de la piel, y en ácido fólico, que es crucial para el metabolismo de las proteínas y la formación de glóbulos rojos. Además, los frijoles aportan tiamina, que juega un papel vital en la función cerebral y en la conversión de los alimentos en energía.
En cuanto a los minerales, los frijoles son una fuente abundante de hierro, cobre, zinc, fósforo, potasio, magnesio y calcio. Estos minerales son esenciales para diversas funciones del cuerpo, como la formación de huesos fuertes, la regulación de la presión arterial y el mantenimiento de un sistema inmunológico saludable.
Fibra y Salud Digestiva
Los frijoles son ricos en fibra soluble, un tipo de fibra que ayuda a controlar los niveles de glucosa en la sangre, reduce el colesterol y mejora la microbiota intestinal, contribuyendo a una mejor salud digestiva. Además, su contenido de fibra insoluble es eficaz para prevenir el estreñimiento y las hemorroides, promoviendo un tránsito intestinal saludable. Según la investigadora Gálvez Mariscal, estos beneficios hacen que los frijoles sean una opción excelente para personas que buscan mantener una dieta equilibrada y saludable.
Consumo de Frijoles en México: Una Tendencia a la Baja
A pesar de los numerosos beneficios para la salud que ofrecen los frijoles, su consumo en México ha disminuido significativamente en las últimas décadas. De acuerdo con datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), el consumo per cápita de frijoles en México ha caído casi un 50% entre 1980 y 2021, pasando de 16 a 9 kilogramos anuales. Esta disminución puede atribuirse a varios factores.
La experta de la UNAM, cuyo trabajo ha sido galardonado con el Premio Nacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos en 1990 y 2002, señala que una de las razones principales para la reducción en el consumo de frijoles es el prejuicio cultural que asocia este alimento con la pobreza. Además, las flatulencias que puede causar su consumo son otro factor que desalienta a algunas personas a incluir frijoles en su dieta diaria.
Recomendaciones para Incluir Más Frijoles en la Dieta
Gálvez Mariscal recomienda aumentar el consumo de frijoles debido a sus propiedades nutricionales y beneficios para la salud. Para reducir los efectos secundarios como las flatulencias, sugiere métodos de preparación adecuados, como el remojo de los frijoles antes de cocinarlos y la incorporación de hierbas digestivas como el epazote. Estos métodos no solo ayudan a mejorar la digestibilidad de los frijoles, sino que también preservan sus nutrientes esenciales.
Los frijoles son un alimento completo que ofrece múltiples beneficios para la salud. A pesar de la disminución en su consumo en México, es crucial rescatar su valor nutricional y funcional en la dieta diaria. Incorporar frijoles de manera regular puede contribuir significativamente a una alimentación más saludable y equilibrada, promoviendo así el bienestar general de la población. Como lo indica la investigación de la UNAM, es hora de volver a valorar los frijoles como un superalimento en la cocina mexicana.
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