Un grupo de mujeres usuarias del Centro de Atención Integral para las Mujeres (CAIM), ubicado en este municipio, se manifestó frente a las instalaciones de la Secretaría de las Mujeres para denunciar despidos injustificados y condiciones precarias dentro del centro.
Las manifestantes señalaron que personal administrativo del CAIM despidió sin previo aviso a varios trabajadores del área de cocina, secretaría y al maestro de computación, todos con una antigüedad laboral de entre tres y cinco años. Los ceses, aseguran, ocurrieron de manera abrupta, vía telefónica, y sin explicación formal por parte de la administración.
Además de los despidos, las mujeres denunciaron la creciente falta de condiciones dignas para su capacitación. Aseguran que actualmente no cuentan con agua suficiente para la cocina, ni con gas, lo que las obliga a comprarlo por cuenta propia. Incluso mencionaron que deben llevar sus propios trastes, ya que los utensilios antes disponibles han desaparecido sin explicación.
Uno de los despidos que más indignación causó entre las usuarias fue el de la chef Yuri, quien durante años ha sido una figura fundamental en la capacitación de mujeres en situación de vulnerabilidad. Tan solo en el turno matutino, son alrededor de 25 mujeres las que asisten regularmente a los talleres de cocina que ella impartía.
Gracias a esta formación, muchas han comenzado pequeños emprendimientos, elaborando productos como pasteles, chocolates y comida casera para generar ingresos. Por ello, exigieron a las autoridades la inmediata reinstalación de la chef Yuri en su puesto.
En conclusión, las mujeres hicieron un llamado urgente a la Secretaría de las Mujeres del Estado de México para que atienda sus denuncias, revise la gestión interna del CAIM de Zinacantepec y tome medidas para restituir tanto al personal despedido como las condiciones mínimas para su capacitación y desarrollo.
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