El presidente municipal electo de Toluca, Ricardo Moreno, lanzó una dura crítica contra el PRI y el PAN, tras la polémica generada en torno a la diputada mexiquense Paola Jiménez Hernández, quien enfrenta una posible expulsión del PRI luego de su abstención en la votación sobre la reforma constitucional del Poder Judicial.
En una publicación en su cuenta de Facebook, Moreno expresó su indignación ante la actitud del partido tricolor y de sus aliados, señalando la falta de coherencia en sus acciones. En su declaración, Moreno afirmó:
“¡Están de atar! Gritan a los cuatro vientos que en México se vive una dictadura, pero si alguien de ellos disiente, inmediatamente los expulsan. Así de incoherentes los del #PRIAN. Le expreso mi solidaridad a Paola Jiménez Hernández. Pensar diferente en un partido como el #PRI de hoy no es la mejor forma de crecer políticamente.”
La crítica a la “incoherencia” del PRI y el PAN
Ricardo Moreno, conocido por su postura crítica hacia las coaliciones del PRI y el PAN, subrayó en su mensaje la contradicción entre el discurso de estos partidos y sus acciones internas. De acuerdo con Moreno, mientras el PRI y el PAN suelen denunciar que en México hay una falta de libertades o una supuesta dictadura, sus propios comportamientos reflejan lo contrario. La posible expulsión de Paola Jiménez, según él, es un claro ejemplo de cómo se castiga la disidencia dentro de estas estructuras partidarias.
La crítica de Moreno resalta un problema que no solo afecta a Paola Jiménez, sino a varios políticos que, al manifestar posturas distintas o votar de manera no alineada con la línea oficial del partido, se enfrentan a represalias. Este tipo de acciones, a juicio del presidente municipal electo, ponen en duda la coherencia de los discursos de libertad y democracia que estos partidos pregonan públicamente.
Solidaridad con Paola Jiménez
Moreno también aprovechó su declaración para expresar su apoyo a Paola Jiménez, quien ha sido duramente criticada y presionada por su decisión de abstenerse en una votación clave para el PRI. El líder toluqueño enfatizó que el hecho de “pensar diferente” dentro del PRI actual es una postura que parece no ser bienvenida, lo que, desde su perspectiva, limita el crecimiento político de quienes forman parte del partido.
Paola Jiménez se ha convertido en el centro de la polémica no solo por su voto en abstención, sino también por las fuertes reacciones que ha generado entre sus compañeros de partido. Desde el PRI en Toluca, han solicitado formalmente su expulsión, argumentando que su postura va en contra de los principios del partido y que podría interpretarse como un apoyo indirecto a la Cuarta Transformación.
El debate sobre la disidencia política
Las declaraciones de Ricardo Moreno no solo ponen en el centro de la discusión la situación de Paola Jiménez, sino que abren un debate más amplio sobre la capacidad de los partidos políticos en México para tolerar y fomentar la pluralidad de opiniones dentro de sus filas. La falta de espacio para la disidencia, según Moreno, no contribuye al crecimiento político ni a la democracia interna de los partidos.
Este tipo de casos revela las tensiones internas que enfrentan los partidos tradicionales, como el PRI, en un momento en que la política mexicana atraviesa transformaciones profundas. La disidencia interna, que en teoría debería ser una señal de un sistema democrático saludable, parece estar siendo penalizada, lo que ha generado críticas tanto dentro como fuera de los partidos.
La declaración de Ricardo Moreno pone de manifiesto la incoherencia que, según él, existe en los partidos como el PRI y el PAN, al castigar a quienes expresan opiniones diferentes o adoptan posturas independientes. En el caso de Paola Jiménez, Moreno muestra su solidaridad y cuestiona la forma en que estos partidos manejan las diferencias internas, sugiriendo que esta falta de apertura al pensamiento crítico podría ser perjudicial para el crecimiento político y democrático.
Este caso sigue generando reacciones y plantea preguntas más amplias sobre el futuro del PRI y cómo manejará las disidencias dentro de sus filas. Mientras tanto, Ricardo Moreno se posiciona como un defensor de la libertad de pensamiento político, al menos en lo que respecta a este controvertido caso.