El pasado lunes por la noche, Guadalupe, conocida como “La Güera”, fue asesinada en un ataque armado en el centro de Metepec. Este hecho se suma a otros tres homicidios ocurridos en el Valle de Toluca durante los primeros días de diciembre, lo que evidencia un preocupante repunte en la violencia de la región.
El velorio de Guadalupe se llevó a cabo en una vivienda de la calle Altamirano, en el barrio de San Mateo, Metepec. En un ambiente cargado de tristeza y hermetismo, sus familiares evitaron dar declaraciones a los medios de comunicación y exigieron respeto para su duelo. Incluso, se mostraron firmes al impedir que se tomaran imágenes del evento.
Guadalupe, quien había sido señalada como presunta narcomenudista y ya había sufrido un ataque a balazos en 2022, fue ejecutada en circunstancias que aún no han sido esclarecidas por las autoridades.
La muerte de Guadalupe es sólo una de las tragedias que marcaron los primeros días de diciembre en el Valle de Toluca. A continuación, un resumen de los casos:
Guadalupe fue asesinada al interior de un mercado de antojitos ubicado al lado de El Calvario, donde supuestamente vendía drogas. Este crimen impactó a la comunidad, que se muestra preocupada por el incremento de hechos violentos en su zona.
Por otro lado, el cuerpo de una mujer fue hallado entre milpas en el poblado de San Antonio Atotonilco. Presentaba múltiples heridas de arma blanca y, aunque fue encontrada con vida por las personas que la localizaron, falleció antes de recibir atención médica. Este caso apunta a un posible feminicidio, aunque las autoridades no han emitido información oficial.
En Toluca, una pareja fue asesinada a balazos en la colonia 8 Cedros, en la calle Lago del Gran Oso. Testigos señalan que el atacante viajaba con las víctimas en una camioneta tipo Jeep y escapó a pie tras cometer el crimen. Hasta ahora, no ha sido identificado, y los motivos del ataque son desconocidos.
A pesar de la gravedad de los hechos, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) no ha emitido información sobre estos casos, generando preocupación entre los habitantes del Valle de Toluca. La falta de esclarecimiento y la impunidad alimentan la percepción de inseguridad en la región.
Los crímenes ocurridos parecen responder a distintos móviles, desde ajustes de cuentas relacionados con el narcomenudeo hasta posibles feminicidios, dejando una atmósfera de tensión en la zona metropolitana. La sociedad exige justicia y acciones concretas por parte de las autoridades para frenar esta ola de violencia que empaña el inicio de diciembre.
En concusión, el Valle de Toluca enfrenta un desafío significativo en materia de seguridad. Mientras los familiares lloran a sus seres queridos, la comunidad se pregunta cuándo llegarán las respuestas que tanto necesitan. Urge una respuesta integral que incluya investigación, prevención y justicia para las víctimas de estos crímenes.