En la víspera del Año Nuevo, las familias de Toluca se congregaron en diversos mercados y puntos de venta tradicionales para adquirir productos característicos de estas fechas, destacando la uva como uno de los principales protagonistas. Sin embargo, este año se observó un notable incremento en los precios de este fruto, lo que ha llamado la atención de los consumidores y comerciantes.
En los principales mercados de Toluca, como el Mercado Juárez y el Mercado 16 de Septiembre, los precios de la uva experimentaron un aumento considerable. En el Mercado Juárez, el costo del kilo de uva oscila entre 80 y 120 pesos, dependiendo de su calidad y variedad. Por otro lado, en el Mercado 16 de Septiembre, los comerciantes reportaron un incremento del 80% en comparación con el año pasado, con precios de 120 pesos para la uva roja y hasta 200 pesos para la uva verde, esta última siendo la más costosa.
Los comerciantes ambulantes que se ubican sobre la Vialidad Adolfo López Mateos también ofrecen la uva, con precios que rondan los 120 pesos por kilo. Según expresaron, su mayor volumen de ventas ocurre el 31 de diciembre por la noche, cuando las familias buscan cumplir con la tradicional costumbre de las 12 uvas para despedir el año.
Aunque la uva mantiene su popularidad en las celebraciones de Año Nuevo, otro producto emblemático, la sidra, parece haber perdido terreno entre las nuevas generaciones. Según los comerciantes, su consumo ha disminuido de manera significativa en los últimos años.
“La sidra ya no se vende como antes; ya los jóvenes prefieren otro tipo de bebidas alcohólicas, como cervezas o tequila”, comentó un vendedor de la Vialidad Adolfo López Mateos.
Esta tendencia refleja un cambio en los hábitos de consumo, donde las bebidas tradicionales son reemplazadas por opciones más modernas o adaptadas a los gustos de las generaciones más jóvenes.
Los comerciantes atribuyen el aumento en los precios de la uva a factores como el incremento en los costos de producción, transporte y distribución. Además, la alta demanda durante los últimos días del año contribuye a que los precios se eleven significativamente, especialmente en puntos de venta más concurridos.
Por su parte, el menor interés por productos como la sidra podría estar relacionado con un cambio en las preferencias culturales y el surgimiento de nuevas tradiciones entre los consumidores jóvenes, quienes buscan alternativas más económicas o adaptadas a sus estilos de vida.
A pesar de las variaciones en los precios y las preferencias de consumo, las celebraciones de Año Nuevo en Toluca continúan siendo un momento clave para preservar tradiciones como el consumo de las 12 uvas, símbolo de buenos deseos para cada mes del año que comienza. Los mercados de la ciudad mantienen su papel como epicentros de estas festividades, ofreciendo una amplia variedad de productos para todos los gustos y presupuestos.
En conclusión, el aumento en los precios de la uva y la disminución del consumo de sidra reflejan no solo un cambio en las dinámicas económicas, sino también en los hábitos culturales y de consumo en Toluca. Estas tendencias marcan el inicio de un nuevo año con desafíos y oportunidades para los comerciantes y consumidores.